15.2.13

Futuro y tecnología

Como ya anticipé, he estado dándole vueltas a una situación hipotética que puede llegar a darse en el futuro.

En primer lugar, los antecedentes.

Últimamente y de forma más que notable están apareciendo documentales sobre la nanotecnología, concretamente sobre la nanotecnología combinada con la biotecnología (en éste mismo blog se relacionó en un artículo una conferencia sobre "vertidos atmosféricos que alteran nuestra química").

Esta situación me dio curiosidad sobre el tema, teniendo en cuenta mi tendencia hacia la física y la tecnología (soy el producto de un robotista frustrado que nunca superó el nivel la mecánica), así como por la admiración que siento por los autores de ciencia ficción que a veces actúan como auténticos profetas y no pueden evocar nada sino admiración.

El resultado final de esta curiosidad fue el planteamiento de una situación hipotética, que más tarde encontré más verosímil que ficticia: implantes cibernéticos.

Desde luego, así de primeras suena a novela futurista o a argumento de "serie b", sin embargo las prótesis cibernéticas están más cerca de lo puede parecer a priori.
Algunos adelantos:
Son solo algunos ejemplos que demuestran que la ciencia ficción tiene menos de ficción de lo esperado.


Llegados a este punto transmito el planteamiento:

Del mismo modo que en la actualidad las empresas importantes demuestran su poder comprando a sus empleados más representativos el último modelo de iPhone, un cochazo o un traje hecho a medida, en el futuro las empresas lucirán en aquellos selectos empleados lo últimos modelos de iArm, iNterfaz o iBrain: toda clase de "apps" biotecnológicos que aporten competitividad al trabajador mediante el uso de la tecnología cibernética y nano.

Esto supondrá posteriormente la implantación de una nueva variable en las tenidas en cuenta para la contratación, fruto de la popularización de los implantes (como sucedió con los teléfonos móviles).
Como consecuencia inmediata, se disparará la demanda de dichas mejoras al crear una necesidad real de uso. Siguiendo el desarrollo de los acontecimientos, la situación final, en resumidas cuentas, es la siguiente:
el trabajador empleará su dinero en comprar y actualizar los implantes de mejora del rendimiento laboral, los cuáles él mismo fabricará (al dispararse el consumo del producto se disparará la demanda de trabajadores), creando un ciclo entre el trabajador y el producto, que como una sanguijuela absorberá el dinero de las personas de manera irremediable.



Desde luego, solo es una situación hipotética, pero si extrapolamos el sentido general, veremos como en la realidad el sistema capitalista-consumista obra así a menudo, creando necesidades directas en los consumidores con los productos que él mismo fabrica, y que quiera o no, se ve obligado a adquirir para no quedar excluido de su sociedad.




La ciencia ficción, sin duda alguna, son solo supuestos, sin embargo algunos supuestos son demasiado peligrosos como para no tenerlos en cuenta.

3 comentarios:

  1. Me parece una perspectiva muy original. Me gusta.

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  2. http://www.larazon.es/detalle_normal/noticias/1104504/sociedad/el-sindicato-de-estudiantes-admite-que-su-lide el lider del sindicato de estudiantes es un licenciado en sociologia que no estudia desde hace 4 años

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  3. Me encanta!!!! Deformación sindical desde la carrera. Genial enlace Ricardo, muchas gracias por compartirlo.

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